Hotel Casa de Aldea El Frade Ribadesella, Ribadesella

Este acogedor bed and breakfast rural es un verdadero oasis de tranquilidad. La limpieza y el ambiente tranquilo contribuyeron a que nuestra estadía fuera excepcional. Además, Fini, la anfitriona, fue increíblemente acogedora y atenta, ofreciéndonos un desayuno abundante y delicioso. Sin embargo, es importante recordar que algunas atracciones cercanas requieren reservas anticipadas, así que planifica bien tu visita.

Este acogedor bed and breakfast rural es el lugar perfecto para descansar, a solo un corto trayecto de la ciudad de Ribadesella. La limpieza y la tranquilidad del entorno hicieron que nuestra estancia fuera excepcional. Fini, la anfitriona, nos recibió con calidez y nos dio excelentes recomendaciones sobre lugares cercanos a visitar. Sin embargo, es importante tener en cuenta que para visitar la cueva de Tito Bustillo, la reserva y el pago de entradas deben hacerse online, ya que se agotan rápidamente.

Este encantador bed and breakfast rural es un verdadero oasis de tranquilidad, situado a pocos minutos en coche de Ribadesella. La limpieza y la atención de la anfitriona Fini hicieron que nuestra estancia fuera excepcional. Sin embargo, es importante reservar las entradas para la cueva de Tito Bustillo con antelación, ya que están muy solicitadas. El desayuno es increíblemente abundante y delicioso, lo cual es una gran ventaja.

Este acogedor bed and breakfast rural es una joya a solo unos minutos en coche de Ribadesella. La limpieza y la tranquilidad del entorno hicieron que nuestra estancia fuera excepcional. Fini, la anfitriona, te recibe con los brazos abiertos, ofreciendo valiosas recomendaciones sobre lugares cercanos para explorar. El desayuno es abundante y mucho más que un simple desayuno continental, aunque es recomendable hacer reservas para las cuevas de Tito Bustillo con antelación.

Este encantador bed and breakfast rural es un verdadero oasis de tranquilidad, ideal para descansar después de un día explorando la hermosa Ribadesella. La amabilidad de Fini y la limpieza del lugar nos hicieron sentir como en casa. Además, el desayuno fue absolutamente delicioso y abundante, superando nuestras expectativas. Sin embargo, es recomendable reservar con anticipación las entradas para la cueva de Tito Bustillo, ya que se agotan rápidamente.